Política de Cookies
Cuando el propietario de una página web quiere saber qué es lo que ocurre en su página, qué hacen los usuarios en ella o si quieren ofrecer unas funcionalidades extras a los visitantes se usan unos pequeños archivos conocidos como cookies que permiten obtener estos datos u ofrecer esas funcionalidades.
Al usar esta técnica el propietario de la web tiene que dejar bien claro que se usan cookies en ella, así como de qué tipo son, su finalidad o duración en una sección de su página donde esté todo detallado. A esta sección se le conoce como política de cookies.
¿Qué es una cookie?
Una cookie es un archivo pequeño que se crea en su dispositivo o equipo cuando se accede a una web, ésta crea este archivo para almacenar pequeños datos que se envían entre el servidor donde está alojada la página y el navegador desde donde se visita la web.
Su función principal es identificar al usuario almacenando su historial de actividad para conocer sus hábitos y poder ofrecerle un contenido más personalizado cada vez que se acceda a la web que se visita. Otra función que pueden tener las cookies puede ser guardar los artículos que el usuario haya añadido en el carrito de una tienda online.
Existen diferentes tipos de cookies, las más comunes son las cookies propias y de terceros.
Cookies propias
Son aquellas que se generan en el propio sitio web que se visita. Normalmente se suelen usar para mejorar la experiencia del usuario al acceder a la página.
Algún ejemplo de este tipo pueden ser las cookies de inicio de sesión en las que permiten ingresar y salir de una cuenta, recordar el nombre de usuario para más adelante poder ingresar más fácilmente, etc.
Las cookies de personalización son otro ejemplo de este tipo. En ellas permiten al usuario acceder a la página con algunas características predefinidas como sería el idioma o el tipo de navegador desde el que se accede a la página. Estas se parecen mucho a las cookies de preferencias que, como su propio nombre indica, sirven para recopilar gustos o algunos ajustes dentro de la página que se visita.
Un ejemplo de estas cookies pueden ser cuando se accede por primera vez a un sitio web y nos aparece una ventana para inscribirse en el boletín de noticias. Si le damos a cerrar la ventana podremos comprobar que si seguimos navegando por la web no nos volverá a salir esa ventana. Esto es porque se ha almacenado una cookie personalizada en la que se refleja que hemos visto el mensaje. Si en cambio accedemos desde otro navegador diferente nos volverá a aparecer.
Cookies de terceros
Este tipo son generadas por servicios o proveedores externos a la web. Se suelen usar para recopilar datos estadísticos, de uso, gustos de los usuarios, etc. Un ejemplo de esto es Google Analytics que utiliza este tipo de cookies para recopilar información para fines estadísticos.
Hay que tener en cuenta que estas cookies analizan los datos del navegador en sí y no del usuario. Por ello si se accede desde un navegador y posteriormente desde otro diferente se podrá ver que no tiene la misma configuración almacenada.
Qué debe tener una política de cookies
La política de cookies debe tener los siguientes apartados:
- Una breve explicación de qué son las cookies
- Una explicación clara y detallada sobre la finalidad que tienen las cookies que se usan en la página web ya sean propias, de terceros, de seguimiento, etc.
- Se debe indicar también el propietario de esas cookies ya sean de terceras personas o empresas o si es el propio sitio web que se visita.
- Debe de haber una pequeña explicación de cómo se pueden rechazar o eliminar las cookies ya aceptadas del navegador del usuario. Los propios navegadores disponen de una página donde explican cómo eliminar las cookies, un ejemplo de ello son Chrome y Firefox.